Por RIALTA STAFF
27 septiembre, 2022
El pintor, dibujante e instalacionista cubano Ernesto Benítez (La Habana, 1971) expone en Palma de Mallorca, España, su más reciente obra, reunida bajo el título Reset Work. La muestra, inaugurada el 15 de septiembre como parte del festival Nit de l’Art 2022, se podrá ver hasta mediados de noviembre próximo en la Mallorca Progress Society.
La Nit de l’Art 2022 en Palma fue organizada por la asociación de galerías Art Palma Contemporari. Este año el evento alcanzó su vigesimosexta edición e involucró a once galerías “con el objetivo de potenciar la vida cultural de la ciudad y acercar a los ciudadanos a nuevos lenguajes y artistas”, según se consigna en la web del colectivo curatorial.
En conversación con Rialta Noticias, Ernesto Benítez, quien reside hace más de doce años entre Palma de Mallorca y La Habana, afirmó que Reset Work pretende “recomponer, restablecer, reajustar” su práctica artística, a fin de reflexionar “en torno a la empírica necesidad de reajustar una praxis para reestructurar su configuración y redefinir el sentido de su discurso”.
Benítez pertenece a una generación que inició su camino creativo en los años ochenta. Fue integrante del grupo Arte Calle, uno de los proyectos artísticos más subversivos en La Habana finisecular. En la exposición palmesana, el artista cubano parte de dos series bidimensionales y de una instalación concebida para espacio específico. Entre los materiales que utiliza podemos contar el hinojo, el anís, las cenizas de textos filosóficos, libros de estética reducidos a pulpa de celulosa, documentos personales triturados, algodón, vino tinto, barro y un cristo sin cruz.
Las dos series, de alguna manera, insisten en la autobiografía como forma de subjetivación creativa. Por un lado, Extremaución “hurga en las trampas del pensamiento binario expresado en clave dicotómica excluyente y en la paranoica aversión del arte contemporáneo por la representación”; por otro, Sin suturas propone, desde la autorreferencialidad, “una forma de pensar el vacío”, una manera de vaciar “la mente de pensamientos”.
Respecto a la instalación Reset Work Intelligent Design-I, advierte Benítez: “Desde un discurso profundamente contestatario, cuestiona los pilares fundamentales del modo civilizatorio de Europa occidental, una cultura que según Tom Holland «recela de la religión», pero hunde sus profundas raíces en un cristianismo que aún se regodea en su evidente carácter medieval”.
Sostiene asimismo que, con este significante, “restart”, que también puede asociarse a la exposición, no necesariamente se alude al “borrón y cuenta nueva” o “un hipotético estado inicial”. “Reset work”, subraya Benítez, “como proyecto expositivo, en su sentido más amplio propone, en primera instancia, un alto en el camino para reflexionar acerca del proceso de creación, no como una mera búsqueda estética, sino como compromiso ético”.
En una entrevista ofrecida a Artcrónica, Ernesto Benítez ha asegurado que su trabajo “parte de reflexiones y exploraciones en torno a: globalización e identidad sesgada, memoria fragmentada y espiritualidad secuestrada, como evidentes rasgos distópicos de esta era líquida del post-individuo”.
De modo coherente, el artista declara ahora que, “en las coordenadas de una Europa polarizadamente radicalizada”, Reset Work “reflexiona en torno a las transformaciones inherentes a la digitalización de la cultura y al cambio en los formatos y canales de comunicación para abordar los evidentes cambios y los traumas que la cultura hiperinformatizada produce en la subjetividad humana”.
Publicado en la Revista Web de Cultura y Sociedad Rialta Magazine