Delirios, 1993
50 x 35 cm y 70 x 50 cm.
Dibujos realizados con técnica mixta sobre papel Fabriano: acrílico, tempera, pastel, transfer de imágenes y collage con postales eróticas de principios de siglo XX.
Con esta serie se acusa un modo retrogrado de asumir el fenómeno de la sexualidad (desde el tabú, la homofobia y otros prejuicios sociales enquistados en una cultura patriarcal y machista) para cuestionar la doble moral de una sociedad y un sistema ideológico que, persiguiendo, estigmatizando y encarcelando a homosexuales, marginó durante varias décadas a la comunidad LGTBI sin el más mínimo pudor.
Arte Erótico vs Tabú y Prejuicio
En esta serie de obras sobre papel, Benítez -evitando vacuas líricas que pudieran disfrazar el drama del fenómeno- evoca una estética de lo andrógino y se regodea en aquello que la sociedad considera «sucio», «pecaminoso» y lo prohibido, para cuestionar la falsa moralidad y poner énfasis en los prejuicios de las estructuras socio-políticas y culturales en la Cuba del momento (y la de hoy). En la diana: la homofobia endémica de un sistema ideológico, social y político carcomido por la tradición machista y la intolerancia, el irrespeto y la arbitraria, sistemática, restricción de los derechos individuales. Una lamentable realidad que aún no alcanzamos a superar, amén de la reciente homosexualización (más que moderación) del discurso oficial y las cuestionables modificaciones en la obsoleta legislación. En esta serie Ernesto Benítez, a tono con sus principios, más que proponer exige, sustituir el falaz discurso de «tolerancia» por una real y consciente profesión de respeto.